Gobierno realizará el acto en Santo Domingo. Víctimas creen que es una forma de reparación.
Las cicatrices que lleva sobre su cuerpo no le permiten a Alba Yaneth García Guevara olvidar el día en que en medio de un operativo el Ejército Nacional atacó indiscriminadamente desde el cielo a Santo Domingo, un pequeño centro poblado en el departamento de Arauca, donde ella y su familia vivían.
Ese fatídico 13 de diciembre de 1998, en medio de un combate que había con la guerrilla de las Farc, un helicóptero de la Fuerza Aérea Colombiana que sobrevolaba el caserío arrojó un dispositivo cluster (bomba racimo) que dejó a 17 civiles muertos, de ellos siete niños, y a otras 27 personas más heridas, entre ellas a Alba y su hermana.
A ella, quien para la época tenía 16 años, una esquirla le destrozó el hombro izquierdo, a su hermana, Gleydis Xiomara, otro fragmento le atravesó las dos piernas.
“Ese día, los combates arreciaron, las ráfagas venían más fuertes y cercanas. Los helicópteros continuamente volaban y uno de ellos lanzó las bombas. Quién iba pensar que una situación como un bombardeo se iba a presentar”, recuerda Alba.
La mujer añade que tras los hechos, Santo Domingo se convirtió en un pueblo fantasma. Sus pobladores, quienes lograron sobrevivir, se vieron obligados a desplazarse hacia los municipios cercanos.
“Algunas familias retornaron al pueblo por necesidad, porque no había hacia dónde ir. Pero todo quedó en el olvido y de la mano de Dios y de nosotros mismos para sobrevivir”, cuenta Alba, quien en la actualidad se desempeña como docente de bachillerato en el colegio Froilán Farías, en Tame (Arauca).
"Algunas familias retornaron al pueblo por necesidad, porque no había hacia dónde ir"
Este jueves, y tras cinco años de que así lo ordenara la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), el Estado Colombiano pedirá perdón público a las víctimas por esos hechos.
En su fallo, que fue emitido en noviembre de 2012, el organismo internacional estableció la responsabilidad del Estado Colombiano por la violación al derecho a la vida y el derecho a la integridad personal. La Corte IDH en su sentencia señaló que se presentaron fallas en el operativo que adelantaba el Ejército Nacional en ese momento en contra de las Farc.
Para Alba Yaneth García, con ese acto de reconocimiento de culpabilidad por parte del Estado, que será presidido por el ministro de Justicia, Enrique Gil Botero, es un paso que se da para que, después de 18 años, empiece a generarse la reparación, la justicia y la verdad.
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